jueves, abril 15, 2010

Desmenuzando minutos


Hay algo en estos dedos por segundo que no comprendo. Esa ansiedad metálica que se consume con el próximo cigarrillo (todavía no). Y la llamada nocturna que todo lo calmaba, yo velo, tu hablabas. Pero ahora no está, aunque cuando se desea tanto nada te detiene, nada.

Me falta una casa incendiada de risas, un perro de mañana y dos más el domingo, y todo su cariño, me faltan seis cuerdas, ni mas ni menos, el calor de las lámparas, me faltan las cosas que no me faltaban, tengo tanto que no necesito...

Me falta mi vida, si recuerdo de un tiempo en que estabas tan lejos, en cuerpo y en alma, y yo desgarraba segundos haciendo de cada memoria un instante perfecto o cenizas de nada. Recuerdo el dolor, y no diré más nada. Pero tambien tu mirada volver, y no mi palabra. El tiempo quemó los silencios, y entonces cada segundo pasado nos vio despertar y saber que el otro allí estaba, soñando despierto en el rostro del otro riendo...

Hoy es otra la circunstancia, el alma más cerca que nunca, el cuerpo tan lejos... pero nada nos demuestra mas fuerte que esto, que la distancia no existe y el tiempo se rinde cuando tanto se ama.

Será hasta mañana mi niña, y te confieso, espero a la noche para soñar con que estás aquí...

No hay comentarios: